Habitaciones privadas

Habitaciones privadas
En librerías el 10 de marzo

Mi lista de blogs

lunes, 22 de septiembre de 2008

XXIII


Y vino un periodista de no sé dónde
a preguntarnos qué era para nosotros el exilio.
no sé de dónde era el periodista,
pero igual lo dejé pasar
El cuarto estaba húmedo estaba frío
hacía dos días que no comíamos bocado
sólo agua y pan
las cartas traían malas noticias del Otro Lado
“¿Qué es el exilio para usted?” me dijo
y me invitó con un cigarrillo
No contesto las cartas para no comprometer a mis parientes,
“A Pedro le reventaron los dos ojos
antes de matarlo a golpes, antes,
sólo un poco antes”
“Me gustaría que me dijera qué es el exilio para usted”
“A Alicia la violaron cinco veces
y luego se la dejaron a los perros”
Bien entrenados,
los perros de los militares
fuertes animales
comen todos los días
fornican todos los días,
con bellas muchachas con bellas mujeres,
la culpa no la tiene el perro,
sabeusté,
perros fuertes,
los perros de los militares,
comen todos los días,
no les falta una mujer para fornicar
“¿Qué es el exilio para usted?”
Seguramente por el artículo le van a dar dinero,
nosotros hace días que no comemos
“La moral es alta, compañero, la moral está intacta”
rotos los dedos, la moral está alta, compañero,
violada la mujer, la moral sigue alta, compañero,
desaparecida la hermana, la moral está alta, compañero,
hace dos días que sólo comemos moral,
de la alta, compañero,
“Dígame qué es el exilio, para usted”

El exilio es comer moral, compañero.







“Estado de exilio”, 2003

4 comentarios:

Anónimo dijo...

Qué duro de leer, pero mucho más duro debió ser escribirlo.
Un abrazo.

farala dijo...

hace poco se lo leí en Mexico df, a mi pareca de entonces, sentadas en un coche, acababa de comprar tu antología (que en estos momentos viene hacia mi en barco, veracruz-valencia): se me secó la boca, se me quedó la lengua pegada al paladar y esos perros de los militares me persiguieron durante horas...

Anónimo dijo...

También desterrada.

Profundamente conmovida.

Comimos moral y tenemos sed de justicia.

Carmen Momo dijo...

Me están encantando tus poemas, pero éste es... increíble. No sé que más decirte.